El elefante es el animal terrestre más grande y los desplazamientos le suponen un importante esfuerzo físico; por ello son capaces de planificar su viajes en función de los costes energéticos, lo que les lleva a preferir los terrenos poco accidentados y a través de entornos ricos en recursos.
Los elefantes planifican sus viajes para ahorrar energía y según los recursos en la ruta
