El "barro rojo" que ha inundado 40 kilómetros del suroeste de Hungría con metales pesados altamente contaminantes puede suponer un grave riesgo para la salud humana si se inhalan los restos de polvo que queden al secarse, advirtió hoy la organización ecologista Greenpeace.
El vertido de lodo tóxico de Hungría amenaza con contaminar también el aire
