Las emisiones globales de dióxido de carbono (CO2) relacionadas con la energía aumentaron un 0.9 % (321 millones de toneladas) en 2022 respecto al año anterior, lo que supone un alza menor a lo que se temía en el escenario de la crisis energética, que llevó a un mayor uso del carbón.
Las emisiones de CO2 de la energía subieron un 0.9 % en 2022, menos de lo temido
