Empresas y administraciones públicas perciben ya las amenazas que se basan en la inteligencia artificial como el mayor riesgo de seguridad al que se enfrentan durante este año y mayoritariamente sienten también que la complejidad tecnológica es una de las barreras principales para disponer de una estrategia robusta de ciberseguridad.
Empresas y administraciones perciben ya las amenazas basadas en la IA como el mayor riesgo
