El grupo registró pérdidas por valor de 187 millones de euros por sus obligaciones del Estado griego, mientras que su división de seguros tuvo un resultado negativo de 123 millones con estos mismos bonos, según anunció ING en un comunicado.
Su resultado subyacente antes de impuestos fue de 1,977 millones, un 21.6 por ciento más que en el mismo período del año pasado.
Para sus actividades bancarias, el resultado subyacente antes de impuestos de alcanzó los 1,304 millones, un 20 por ciento menos que en el segundo trimestre de 2010; mientras que la división de seguros aumentó su resultado subyacente desde 18 millones hasta 673.
El grupo holandés anunció que no ofrecerá dividendos temporales debido "al entorno financiero incierto" y al aumento de las exigencias de regulación.