Incluye la transferencia de 400 millones de pesos al Instituto para la Prevención y Atención de las Adicciones de la Ciudad de México.
El secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, afirmó que en este sexenio se duplicó el presupuesto para la atención de las adicciones.
El trabajo conjunto incluye el otorgamiento de 400 millones de pesos por parte del gobierno federal al Instituto para la Prevención y Atención de las Adicciones de la Ciudad de México, así como el desarrollo de investigación, acciones de prevención y atención, sobre todo enfocadas a los jóvenes.
En la ceremonia que se llevó a cabo en el auditorio “Miguel E. Bustamante” de la Secretaría de Salud, la presidenta del DIF Nacional subrayó el papel que juega la familia en la prevención o disminución del riesgo de que los jóvenes consuman drogas.
Sin embargo, afirmó, es importante proporcionar a los padres de familia las herramientas necesarias, como lo es la información objetiva, para que puedan comunicar a sus hijos las consecuencias físicas y mentales de las drogas.
En ese contexto, recordó que en junio de 2008 se lanzó la Campaña Nacional de Información para una Nueva Vida, con la participación de la sociedad civil, la cual ha beneficiado a 17 millones de mexicanos, entre padres de familia, maestros y estudiantes.
Y es que ahora, comentó, los padres de familia con hijos que inician la adolescencia, viven con la preocupación de que puedan caer en las adicciones y con ello interrumpan sus planes futuros, “pero es precisamente esa inquietud la que debe moverlos hacia la acción preventiva”, precisó.
Subrayó el trabajo preventivo que han realizado las organizaciones de la sociedad civil, así como quienes en algún momento fueron adictos y ahora se suman a la lucha a favor de la prevención.
Al respecto, el Secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, resaltó que se ha duplicado el presupuesto para la atención de las adicciones, al pasar de 2,200 millones en el sexenio anterior, a casi 5,000 millones en lo que va de esta administración, y esto es una muestra del interés contra esta amenaza para México.
Aclaró que un adicto no es un delincuente, sin embargo, cuando hay consumo de sustancias adictivas ilegales, hay más riesgo de tener un embarazo no planeado, de infecciones de transmisión sexual y violencia intrafamiliar, entre otros problemas, lo que conforma un entorno complejo que requiere una política pública global con diferentes acciones.
En ese sentido, finalizó, se cuenta con la Ley General para el Control del Tabaco que se aplica en casi todo el país, se desarrolló con la sociedad civil el programa de cero tolerancia en la venta de alcohol a menores de edad y operan 323 Centros para la Prevención y Control de las Adicciones llamados Nueva Vida, para los cuales se ha contratado personal.
En su oportunidad, el secretario de Salud del gobierno del Distrito Federal, Armando Ahued, dio a conocer que en el país, 43 por ciento de jóvenes entre 12 y 25 años está expuesto al uso de drogas, la mitad las consume de forma experimental y de ellos, 2 por ciento de hombres y 1 por ciento de mujeres tiene dependencia.
En el Distrito Federal, 53 por ciento de la población entre 18 y 65 años de edad han probado alguna vez un cigarrillo, de ellos, 68 por ciento son hombres y 40.7 por ciento mujeres; en cuanto a consumo de drogas, sin considerar alcohol y tabaco, esta entidad supera la media nacional con 12.8 por ciento en hombres y 4.9 por ciento en mujeres.
En la ceremonia estuvieron como invitados de honor el Comisionado Nacional contra las Adicciones, Carlos Tena Tamayo, y la directora del Instituto para la Prevención y Atención de las Adicciones de la Ciudad de México, Marcela López Cabrera.