En el marco del Foro Empresarial México-España, ante el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y rey de España, Felipe VI, el secretario de Economía afirmó que ambas naciones tienen en las exportaciones una fuente de empleos que se concentran en áreas de alta tecnología.
A su vez, subrayó que las inversiones ofrecen empleos mejor pagados, así como desarrollo de infraestructura y encadenamientos comerciales con las pequeñas y medianas empresas.
Argumentó que la economía mexicana tiene 60 por ciento de apertura de su producto a los flujos internacionales, en tanto que la española es de aproximadamente 50 por ciento.
Ello, afirmó, "se siente y se atestigua cuando las economías pasan por momentos difíciles y el motor que saca a ambos países de sus crisis es la economía internacional".
Abundó que España es el país con un mayor índice de crecimiento de la Unión Europa, y México estará dentro de las 10 primeras economías en 2050, de acuerdo con la Unidad de Inteligencia del Economista, por lo que "es momento para apostarle a las economías mexicana y española".
El funcionario reconoció que México tiene aún trabajo por hacer en cuanto al aprovechamiento de la fortaleza manufacturera, así como de las oportunidades que ofrece España.
Lo anterior, expuso, en función de que el país ibérico es el principal destino de las exportaciones a la Unión Europea, con una proporción de 83 por ciento de productos energéticos.
Afirmó que aunque España es un socio estratégico no refleja en el comercio la evolución de la plataforma productiva de México.
En ese sentido, resaltó que el reto es claro, ofrecer a España manufacturas a precios productivos en industrias como la aeroespacial, cuyo valor de producción aproximado del país es de 14 mil millones de euros, mientras que México es el quinto exportador en el mercado de América del Norte.
Al respecto, Guajardo subrayó la oportunidad de poder producir una aeronave de forma conjunta.
Además, destacó la evolución del mercado automotriz en el país, el cual es el séptimo exportador en el ámbito internacional, en tanto que España ocupa la quinta posición en el sector europeo.
De esta manera, Guajardo reconoció la modernización del Tratado de Libre Comercio con Europa tras la visita del presidente Enrique Peña Nieto en 2014.
En su oportunidad, el presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce), Valentín Díez Morodo, reconoció el esfuerzo del gobierno federal en estos tres años, que con el apoyo del sector privado, logró la aprobación de las reformas estructurales, que “han empezado a rendir dividendos”.
“Esto se refleja en una mayor competitividad de nuestra economía, pues estos elementos han venido a reforzar la estabilidad de las principales variables del sector financiero que incluyen una deuda externa y un déficit presupuestario reducidos, así como un bajo nivel de inflación”, subrayó.
Destacó la relación económica de México con España, que es el cuarto cliente y décimo proveedor más importante y es el tercer país inversionista con más de 50 mil millones de dólares, reflejados en cinco mil 300 sociedades hispano-mexicanas.