Mollie Horwitz, que dejó su natal Lituania escapando de los nazis, encontró un nuevo país en Cuba y tras el triunfo de la revolución se trasladó a EE.UU., celebró su cumpleaños número 106 con un mensaje: "la edad no es nada, la mente es todo".
Mollie Horwitz, que dejó su natal Lituania escapando de los nazis, encontró un nuevo país en Cuba y tras el triunfo de la revolución se trasladó a EE.UU., celebró su cumpleaños número 106 con un mensaje: "la edad no es nada, la mente es todo".