México no puede aceptar el “borron y cuenta nueva” que propone Peña Nieto

El Partido de la Revolución Democrática publicó un comunicado en el cual rechaza la postura de Peña Nieto para “darle la vuelta a la hoja y comenzar un nuevo capítulo en la historia de nuestro país”.

Hortensia Aragón Castillo, Coordinadora Nacional del Foro Nuevo Sol-PRD, firma un comunicado en el cual se pronuncia por un “cambio responsable y de fondo”, así como no olvidar la pobreza extrema de millones de mexicanos y los 60,000 asesinatos en la guerra contra el crimen organizado.

A continuación el comunicado integro firmador por Hortensia Aragón Castillo:

Hace unos días, Enrique Peña Nieto pidió “darle la vuelta a la hoja y comenzar un nuevo capítulo en la historia de nuestro país”, como si hechos tan graves como el contabilizar en cinco años más de 60 mil asesinatos en un país sin guerra civil y más de la mitad de los 112 millones de mexicanos sumidas en la pobreza extrema merecieran el “borrón y cuenta nueva” que propone quien es responsable -entre otras cosas- de los más de mil feminicidios que se cometieron durante su gestión como gobernador del estado de México.

Cuando habla de un “cambio responsable y de fondo” para dejar atrás “la estela de miedo y falta de oportunidades” que Felipe Calderón irremediablemente heredará a los mexicanos, lo que en realidad Peña Nieto quiere decir es que a partir de este momento buscará junto con el PRI concretar una concertacesión política que pase por esconder bajo la alfombra los graves actos de corrupción que se han cometido en prácticamente toda la administración pública durante los casi 12 años de gobiernos panistas.

¿Se puede lograr un “cambio responsable y con certidumbre” que le dé al país “condiciones para un mejor porvenir”, cuando para Peña Nieto “darle la vuelta a la hoja” significa proteger a Tomás Yarrington, Eugenio Hernández y Manuel Cavazos Lerma de los serios señalamientos que se han formulado en su contra por el crimen no aclarado de Rodolfo Torre Cantú?

¿Cómo se le puede “dar la vuelta a la hoja” cuando Peña Nieto pretende que las mexicanas y los mexicanos olvidemos que Humberto Moreira es el principal culpable del monstruoso endeudamiento por más de 38 mil millones de pesos que mantiene al estado de Coahuila prácticamente quebrado y de la violencia que sigue imperando en las calles de las principales ciudades de la entidad?

¿Se vale aceptar el “borrón y cuenta nueva” que pide Peña Nieto cuando su partido no ha aclarado el origen y destino de los 25 millones de pesos en efectivo que fueron incautados en un avión del gobierno del priista Javier Duarte?

Se equivoca Peña Nieto si piensa que la mejor manera de lograr un “cambio responsable” significa volver a los tiempos del PRI en los que, como afirmó Sócrates Rizzo, se pactaba con los narcos las rutas por las que mueven la droga a cambio de que la violencia y el crimen no agobiaran las ciudades y a sus habitantes.

Enrique Peña Nieto no está preparado para hacerse cargo del futuro de México. Nuestro país no puede ser gobernado por quien durante su paso por el estado de México esquivó la responsabilidad de enfrentar y esclarecer los más de mil asesinatos de mujeres que se cometieron en la entidad entre 2005 y 2011 y que a la fecha siguen impunes.

México no puede ni debe ser gobernado por el partido que asume que el modelo de democracia que debe prevalecer en el futuro en nuestro país es el que se instrumentó durante los pasados comicios de Michoacán, en el que la presencia de dinero de dudosa procedencia y los amagos del crimen organizado contra candidatos de todos los partidos fueron el lugar común.