Demanda Calderón una política de Estado que trascienda ideologías

El presidente Felipe Calderón llamó a los partidos políticos a avanzar en una definición de una política de Estado en materia de seguridad, “no para respaldar al presidente ni a su partido, sino para promover un bien superior, un México de paz y justicia, un México de leyes”.

Sostuvo que México demanda una política de Estado en la materia que trascienda partidos, ideologías, coyunturas y periodos de gobierno, que derive del acuerdo de las fuerzas políticas.

Dejó en claro que las diferencias no debilitan ni desprestigian a la política, “lo que daña profundamente a una nación es que la política no pueda trascender esas diferencias”.

En el Diálogo por la Seguridad. Hacia una Política de Estado, ante dirigentes de todos los partidos políticos, a excepción del PT, el mandatario puntualizó que esta tarea no admite cálculos de “vencedores y vencidos”.

Esto, dijo, porque “lo que está en juego es el futuro de la nación”, y subrayó que el diálogo por la seguridad busca poner el interés superior de la nación por encima de cualquier otra consideración.

En el Casino Militar del Campo Marte, el titular del Ejecutivo sostuvo que el apoyo de los partidos es imprescindible para consolidar una política de Estado en materia de seguridad, “tiene que quedarnos claro que el enemigo son los criminales, es el crimen en sus distintas expresiones”.

Para contribuir a la solución del problema, gobiernos y partidos deben refrendar la premisa fundamental de que el Estado tiene el deber irrenunciable de combatir a la delincuencia, lo cual, aunque parece obvio, “ya no lo es, porque he escuchado voces que cuestionan que el Estado esté combatiendo a los criminales”.

“Sé que la estrategia también ha sido cuestionada, y mi gobierno ha estado y está en la mejor disposición de revisarla, fortalecerla o rectificarla si es necesario”, ofreció.

“Lo que pido, simplemente a los actores políticos y sociales, son ideas claras y propuestas precisas acerca de cómo debe mejorarse esta estrategia”, anotó.

Calderón indicó que si alguien considerase que el error del gobierno ha sido combatir la criminalidad, también es momento oportuno que lo diga abiertamente y sinceramente, y comparta con la sociedad las razones por las cuáles opina que esta premisa fundacional del Estado de derecho ha dejado de tener vigencia.

Añadió que, si por el contrario, existe consenso de que esa es la misión del Estado, entonces el diálogo debiera enfocarse a discutir, analizar y perfeccionar juntos la Estrategia Nacional de Seguridad.

La lucha contra la criminalidad exige de todos los mexicanos conciencia y compromiso, valentía, decisión, unidad de acción, y “esto es particularmente cierto para quienes desempeñamos una función pública”, afirmó.

El mandatario dejó patente su voluntad de apertura personal y del gobierno federal, pues “tenemos frente a nosotros la oportunidad histórica de cambiar el destino del país en esta materia y construir una nueva institucionalidad”.

En el acto, que se lleva a cabo en el Campo Marte, se encuentran los presidentes del PRI, Beatriz Paredes Rangel; del PAN, César Nava Vázquez; del PRD, Jesús Ortega Martínez; de Nueva Alianza, Jorge Kahwagi Macari; de Convergencia, Luis Walton Aburto, y el secretario de Procesos Electorales del PVEM, Arturo Escobar.

Calderón Hinojosa les hizo ver que como líderes de las fuerzas políticas tienen un papel fundamental en la construcción de una política de Estado contra la inseguridad, así como una capacidad de influencia y decisión que en este momento es requerida por el país.

También hizo notar que los partidos políticos ocupan espacios en los poderes Legislativos de la federación y los estados que los coloca en posición privilegiada para contribuir en la consolidación de un México de instituciones fuertes y representativas, que respondan a las necesidades y demandas de seguridad de los ciudadanos.

Con la participación de los partidos y el desempeño de sus grupos parlamentarios, reconoció, se han dado avances significativos en materia legislativa; sin embargo, es claro que la agenda de transformación de las instituciones requiere un nuevo ímpetu y de mayor responsabilidad.

Recordó que en las diversas plataformas y programas presentados por los partidos políticos hay el “denominador común “ de un compromiso por la seguridad de los ciudadanos, por lo cual “ha llegado el momento de darle cauce a nuestras coincidencias”.

El titular del Ejecutivo insistió en que el diálogo no supone renunciar a las tesis que nos hacen distintos ni sacrifica el juicio crítico de la realidad sobre la acción de los gobiernos, y llamó a fortalecer la institucionalidad, pues su debilidad, consideró, es el “talón de Aquiles” de México.

Dijo que quienes participan en el Diálogo por la Seguridad este martes tienen mayor capacidad de impulsar decisiones públicas, tanto a través de las representaciones legislativas, como por medio de las autoridades emanadas o postuladas por los propios partidos, en especial en los gobiernos estatales y municipales.

Es “indispensable”, afirmó, que las fuerzas políticas sean protagonistas de este diálogo, y se dijo convencido de que su participación responsable es una pieza clave en la construcción del bien común en una sociedad democrática, y que no hay democracia duradera sin partidos fuertes y responsables.

Mencionó que como en cualquier democracia, la exigencia ciudadana fortalece a todos y cada uno siempre y cuando sean capaces de atender y encabezar la inquietud, exigencia de la lucha por la seguridad de todos los mexicanos.

“Tengo plena confianza en que sabremos todos responder a esta justa demanda”, expresó, al tiempo de reconocer que el país pasa por un momento particularmente delicado en el tema de la delincuencia.

El presidente Calderón Hinojosa señaló que el desafío delincuencial demanda de todos, a cada quien en la medida de su responsabilidad y capacidad, un esfuerzo y un compromiso común, coordinado y superior para hacerle frente.

El mandatario es acompañado por los secretarios de Gobernación, Francisco Blake Mora, y de Seguridad Pública, Genaro García Luna; así como por el procurador General de la República, Arturo Chávez; el consejero jurídico de la Presidencia, Miguel Alessio Robles, y el titular del Cisen, Guillermo Valdés.