Arturo Beltrán Leyva, alias "El Barbas", era uno de los capos más buscados en México y la Fiscalía mexicana ofrecía por su captura 30 millones de pesos (unos 2.3 millones de dólares).
El abatido encabezaba el cártel, cuyo liderazgo compartía con otro de sus hermanos, Mario Alberto Beltrán Leyva, alias "El General".
Un portavoz de la Secretaría de la Marina indicó que, junto con Arturo Beltrán Leyva, en el choque a tiros y con lanzamientos de granadas fueron abatidos tres sicarios más y otro se suicidó cuando iba a ser detenido.
Más tarde, el contraalmirante José Luis Vergara dijo a la cadena Televisa que los infantes de Marina hallaron después en la zona los enfrentamientos los cadáveres de otros dos sicarios, con lo que suman siete los muertos.
"Tenemos ya ratificado de que se trata de él (Arturo Beltrán Leyva)", dijo al confirmar la muerte del capo.
También resultaron heridos tres infantes de Marina en tiroteo que tuvo lugar en unos edificios de apartamentos del centro de la ciudad de Cuernavaca, capital de Morelos.
Este enfrentamiento se derivó de otro que tuvo lugar el pasado viernes en la localidad de Tepoztlán, también en Morelos, donde un grupo de integrantes del cartel de los Beltrán Leyva celebraba una fiesta.
En esa ocasión, los infantes de Marina se enfrentaron con los sicarios, tres de los cuales resultaron muertos y once capturados.
Además fueron detenidos varios artistas, entre ellos el legendario cantante Ramón Ayala y su grupo "Los Bravos del Norte", que actuaban en la celebración y son interrogados por la Subprocuraduría de Investigación Especializada de la Delincuencia Organizada (Siedo).
El mayor cartel mexicano corruptor recibe duro golpe con la muerte de su jefe
El cartel de los hermanos Beltrán Leyva, uno de los más violentos y con un fuerte poder corruptor, recibió hoy el más duro golpe en su corta historia al ser abatido a tiros su máximo capo, Arturo Beltrán Leyva, en un enfrentamiento a tiros con infantes de Marina en el central estado de Morelos.
Beltrán Leyva y seis de sus sicarios murieron en un exclusivo barrio residencial de Cuernavaca, capital de Morelos, tras un intenso tiroteo en el que salieron a relucir granadas de fragmentación.
Arturo el mayor de los Beltrán Leyva, originarios de Sinaloa, el estado considerado cuna de los principales narcotraficantes del país, comandaba el cartel que lleva el nombre de esa familia y que se constituyó en 2008 después de la captura en enero de ese año de Alfredo "El Mochomo" Beltrán Leyva.
Los Beltrán Leyva eran parte del poderoso cártel de Sinaloa, comandado por Joaquín "El Chapo" Guzmán, pero, según fuentes de inteligencia, se escindieron de este grupo porque consideraron que la captura de "El Mochomo" se debió a una traición del capo sinaloense, contra quien iniciaron una guerra a muerte matándole a uno de sus hijos en un ataque con lanzagranadas a un centro comercial en Culiacán, capital de Sinaloa.
Esas traiciones y muertes atizaron la rivalidad entre "El Chapo" Guzmán y los Beltrán Leyva, lo que se pasaron al cartel del Golfo, acérrimo enemigo del primero.
En tres años, la violencia atribuida al crimen organizado, en particular al narcotráfico, suma 16 mil muertes, principalmente de sicarios y capos de los seis grandes carteles que operan en México: El Golfo-Zetas, Sinaloa, Los Beltrán Leyva, los hermanos Arellano Félix, los Carrillo Fuentes y La Familia Michoacana.
Arturo Beltrán Leyva, alias "El Barbas", era uno de los capos más buscados en México. Este hombre encabezaba el cártel, cuyo liderazgo compartía con otro de sus hermanos, Mario Alberto Beltrán, y con el sanguinario Edgar Valdez, alias "La Barbie".
Al capo fallecido se le atribuyen este año la muerte de decenas de personas en los estados de Guerrero y Morelos, en cuyos cuerpos fueron dejados mensajes que indicaban que había sido obra de "El jefe de jefes", pero la versión no fue confirmada oficialmente.
Además de sanguinarios, los Beltrán Leyva ejercieron su poder corruptor para infiltrar a los cuerpos anticrimen organizado y llegaron hasta su cabeza, el zar antidrogas en los dos primeros años del actual gobierno (2006-2012), Noe Ramírez Mandujano.
La detención de Ramírez Mandujano se produjo en la llamada "Operación Limpieza", que en los últimos meses ha dado como resultado la captura de varios altos funcionarios federales presuntamente aliados con el narcotráfico, principalmente con los Beltrán Leyva.
Según la Fiscalía federal, el ex "zar" antidrogas Ramírez Mandujano recibía pagos de 450 mil dólares mensuales de los Beltrán Leyva.
De acuerdo a informes oficiales, en los tres años de Gobierno de Felipe Calderón han sido detenidos por la Policía Federal más de 800 personas vinculadas a los distintos cárteles de las drogas, la mayoría de los cuales (388) eran integrantes del cartel del Golfo-Zeta (al que están aliados los Beltrán Leyva), seguidos de La Familia Michoacana, con 200 capturados.
Fuentes académicas y de inteligencia calculan que en México medio millón de personas trabajan para los cárteles, de los cuales unas 300 mil en el cultivo de marihuana y amapola, unas 160 mil en el transporte y comercialización de la droga, y los restantes 40 mil son sicarios y capos.