Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la industria del autotransporte constituyó 5.5 por ciento del Producto Interno Bruto en 2017 y actualmente cuenta con más de 145,000 empresas transportistas, de las cuales 117,000 se clasifican como hombre camión, es decir, que tienen entre una y cinco unidades en su parque vehicular.
La magnitud de esta industria es inegable y las condiciones en México son retadoras. Su incidencia trasciende más allá del terreno económico.
En México, 67 porciento del parque vehicular del autotransporte tiene un nivel de emisiones que se rige por la normativa EPA98 o anterior, lo que significa que una antigüedad promedio de las unidades es de 17 años. Esto representa costos ambientales además de costos de operación más elevados para los transportistas por el consumo de combustible. Para promover un transporte limpio, la adopción de tecnologías más avanzadas es clave, como referencia, vehículos apegados a la normatividad Euro V pueden llegar a ser 42 por ciento más eficientes que 50 por ciento de la flota actual de vehículos , lo que disminuiría las emisiones de manera considerable.
A partir de enero del próximo año entra en vigor la NOM 044, cuyo período de transición es de seis meses e implica un cambio tecnológico de motores, al sustituir la tecnología actual EPA 04/Euro IV por EPA 07/Euro V y EPA 13/Euro VI, mismas que Daimler Trucks ya produce y comercializa en diversos países del mundo, por lo que la compañía está preparada para cumplir con la nueva regulación, según la cual, a partir del 1 de julio del siguiente año los vehículos nuevos a la venta deberán estar equipados con estas tecnologías.
Para que la implementación de la nueva normatividad sea óptima, es imperativo que a nivel de infraestructura se garantice la disponibilidad en todo el territorio nacional de diésel con no más de 15 partes por millón de contenido de azufre, así como del agente reductor.
Otro aspecto fundamental es el desarrollo de la infraestructura carretera, debido a que ésta tiene un impacto directo en la disminución de costos de transporte y un mayor acceso a mercados y demanda de productos, lo cual se ve disminuido cuando la calidad de las autopistas y carreteras es baja. En este sentido, durante los últimos 10 años, la extensión de las autopistas en México ha crecido 3.5 por ciento anualmente, pero la calidad del mantenimiento aún no es la adecuada, lo que coloca a México en el lugar 52 de 140 en cuanto a calidad en el rubro, de acuerdo con el World Economic Foum.
En este contexto, el mercado mexicano tiene mucho potencial para crecer, para lo cual es necesaria la inversión – pública y privada – que asegure una mayor competitividad, aunado a la mejora de aspectos clave en el sector como el desarrollo de infraestructura, seguridad, sustentabilidad y profesionalización de operadores.
Sobre estos temas, Flavio Rivera, presidente y director general de Daimler Vehículos Comerciales México, expusó el entorno y retos de la industria del autotransporte en el VXI Congreso Internacional de la Industria Automotriz en México.
El líder de la compañía, expresó también el fuerte compromiso que tienen por mejorar las condiciones de la industria en México, para lo cual han participan activamente en alianzas estratégicas con academia y organizaciones del sector en favor de la profesionalización de los operadores, lo cual implica beneficios económicos para los transportistas y de seguridad y ambientales para la sociedad en general en las carreteras del país.