El cambista Alberto Youssef, preso desde marzo pasado por integrar una red de lavado de dinero que habría ayudado a blanquear parte de los fondos desviados, negocia recibir el dos por ciento de los valores recuperados. Se estima que durante los años 2004 y 2012, la red desvió unos 3.900 millones de dólares.
"Estamos trabajando con esa estimativa (de que reciba el dos por ciento de lo recuperado). Alberto conoce muy bien el camino del dinero en los paraísos fiscales", dijo al respecto el abogado de Youssef, Antonio Figueiredo Basto.
Agregó que el acuerdo de delación premiada firmado por su cliente, quien suministró a la Policía Federal y la Fiscalía los detalles y una nómina de beneficiarios de los fraudes, a cambio de una reducción en la pena, es el único, de un total de nueve acuerdos firmados por otros involucrados, que contiene la cláusula de "performance" o "tasa de éxito".
El acuerdo obliga a Youssef a pagar una multa de 40 millones de reales (unos 15,3 millones de dólares) por los delitos cometidos.
Entre otros bienes, según "Folha", Youssef perderá un hotel en Porto Seguro y participaciones en otros hoteles brasileños localizados en las ciudades de Aparecida, Jaú y Londrina.
También perderá otros dos inmuebles y tres automóviles de lujo: un Volvo CX 60 blindado, un Mercedes Benz CLS 500 y un Tiguan blindado.
Según Figueiredo, la cláusula de performance "existe en el mundo entero, en los países que tienen los mejores modelos de combate a la corrupción, como Estados Unidos".
El escándalo en la mayor empresa pública brasileño estalló en marzo pasado, cuando Youssef y el ex director de Abastecimiento de la petrolera, Paulo Roberto Costa, fueron detenidos.
Ambos revelaron la red de corrupción que actuó en el seno de la estatal, en la cual, aseguran, participaron las principales empresas contratistas del ente, varios altos funcionarios y decenas de políticos, cuyos nombres se espera conocer en febrero.