La agencia estatal Saba informó que Hadi planea reunirse con sus asesores, entre ellos un representante del movimiento houthi, para abordar el conflicto.
Residentes de la capital, Saná, informaron de tiroteos y fuego de artillería en la zona. Mientras que los houthis han pedido refuerzos, la guardia presidencial ha desplegado tanques alrededor del palacio, que se encuentra en el sur de la ciudad.
Ambas partes se acusan mutuamente de iniciar los enfrentamientos, los más graves en la capital desde que la milicia chiita tomó el control de la ciudad en septiembre.
Un funcionario de seguridad señaló a dpa a condición de anonimato que la batalla comenzó cuando una patrulla houthi se acercó demasiado al perímetro del palacio presidencial, por lo que los guardias abrieron fuego. La televisión houthi Al Maseera acusó a los guardias de estar disparando contra civiles.
El conflicto se produce dos días después de que la milicia chiita secuestrara al jefe de gabinete del presidente Hadi. Ahmad bin Mubarak estaba de camino a entregarle al presidente una copia del borrador de la nueva Constitución del país cuando fue capturado.
La nueva Constitución establece un sistema federal de seis regiones al que se oponen los chiitas porque dividiría áreas del norte de Yemen en las que tienen gran influencia entre tres regiones federales diferentes.
El secuestro de Bin Mubarak, que es el secretario general de la comisión que elabora la Carta Magna, provocó una indignada reacción en el sur de Yemen, de donde es originario.
La milicia houthi quiere revivir las tradiciones del Zaydismo, una rama chiita históricamente predominante en el norte de Yemen. Se ha expandido durante amplias regiones del país durante el año pasado, incluida la capital.
Yemen, uno de los países más pobres del mundo árabe, enfrenta además una insurgencia islamista encarnada por Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA), la rama local de la red terrorista internacional, que ha realizado numerosos ataques contra los houthis en los últimos meses.
La AQPA se atribuyó la semana pasada la responsabilidad por la masacre del 7 de enero contra la redacción de la revista satírica francesa "Charlie Hebdo". (DPA)