La Liga Árabe manda un mensaje de desesperanza a Siria

La Liga Árabe dejó claro hoy en la clausura de su cumbre en Kuwait que no pueden esperarse más iniciativas por su parte para poner fin a la guerra civil de Siria

En la declaración final, los jefes de Estado instaron al régimen de Bashar al Assad a poner fin al derramamiento de sangre. Pero a la vez señalaron que los países árabes no pueden solucionar solos el conflicto sirio e ignoraron el problema de los yihadistas extranjeros que se unieron a organizaciones terroristas en Siria. Tampoco acordaron el envío de más armas a los rebeldes, como había pedido la oposición.

"Teníamos bajas expectativas y teníamos razón en ello", afirmó Fais Sara, miembro de la delegación de la oposición siria que fue invitado como observador a la cumbre. El asiento de Siria en la Liga Árabe, que le fue retirado al régimen de Al Assad en 2011, se mantuvo vacío en esta cumbre.

La cita de dos días se vio ensombrecida por las tensiones entre los países del Golfo, sobre todo debido a la postura de Qatar.

El emir de Qatar, Tamim al Thani, dejó claro el martes que su gobierno no retirará su apoyo a los Hermanos Musulmanes de Egipto, algo que le habían pedido Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos.

Según dijo a dpa Mohamed Faruk Taifur, un destacado miembro de los Hermanos Musulmanes sirios, las diferencias entre los países del Golfo no son un motivo para que la Liga no haya adoptado ninguna decisión importante respecto de Siria. "No hay esas diferencias en la cuestión siria", afirmó.

Aun así, la oposición siria admitió que en el último año disminuyó el apoyo político de los países árabes hacia su acusa. Sus esperanzas están puestas ahora en el mediador de la ONU, Lakhdar Brahimi, quien durante la cumbre ocupó un lugar junto al líder de la Alianza Nacional Siria, Ahmed al Yarba.

El lema de esta cumbre de la Liga Árabe era "Solidaridad para un futuro mejor". Pero según círculos diplomáticos, entre los árabes se percibe ahora menos solidaridad que al comienzo de la Primavera Árabe, hace más de tres años. (DPA)