"La competencia debe determinar los precios de venta de los medicamentos", apuntó la NDCR. Hasta ahora el Estado establecía límites a los precios de los fármacos.
Aun así, Pekín advierte que la liberalización se mantendrá siempre que los precios se muevan en un marco "razonable". Si se producen variaciones muy pronunciadas, el organismo regulador podrá volver a actuar. Además, seguirá habiendo restricciones para los narcóticos y los psicotrópicos.
En abril de 2014, la NDRC ya liberalizó los precios para algunos medicamentos, así como para el tabaco, las tasas portuarias y ferroviarias, el transporte aéreo y los servicios públicos.
Los expertos acusaban a las autoridades chinas de distorsionar el mercado con su política de precios y de provocar así dificultades de suministros de algunos medicamentos necesarios.
Las grandes farmacéuticas extranjeras reclaman desde hace años una mayor liberalización del mercado en China, segundo mayor mercado de medicamentos del mundo, por detrás de Estados Unidos. Los pronósticos apuntan que la facturación podría ascender a un billón de dólares (898.405 millones de euros) hasta 2020. En los últimos seis años, las ventas aumentaron casi un 25 por ciento cada año.
El sector tiene sin embargo mala fama en China. Los médicos y personal sanitario de los hospitales públicos reciben un salario muy bajo. Desde hace años es una práctica habitual que lo completen prescribiendo medicamentos muy caros, por los que cobran importantes comisiones de las farmacéuticas.
El gobierno está intentando frenar esas prácticas y hace dos años comenzó a investigar a clínicas y empresas, como al gigante farmacéutico británico GlaxoSmithKline. Sin embargo, desde la Unión Europea se critica que esa campaña vaya sobre todo contra compañías extranjeras y que prácticamente no haya demandas contra productos chinos. (DPA)