Los huracanes pasaron en la noche del martes, en parte muy próximos el uno al otro, y devastaron la pequeña localidad de Pilger.
Un tornado gris oscuro corrió a lo largo de la carretera 275 y por los campos aledaños, meintras que a poca distancia un segundo huracán se abría paso por el lugar. Según CNN, alcanzaron una velocidad de hasta 320 kilómetros por hora.
La cifra de víctimas aún puede crecer. "Esto parece una zona de guerra", dijo el director de los equipos de rescate, Sanford Goshorn, a CNN.
Además de Pilger resultaron afectadas las localidades de Wisner, Stanton y Pender.
Algunas personas conocidas como Storm Chasers ("cazatormentas") salieron a fotografiar y filmar el fenómeno natural, persiguiéndolo en vehículos especiales.
El gobernador Dave Heineman declaró el estado de emergencia, que permite movilizar a la Guardia Nacional en caso de ser necesario. Además, fueron emitidas alertas en los estados de Iowa e Illinois. (DPA)