"Amnistía Internacional considera que las autoridades del estado de Texas sentenciaron a muerte a Ramiro Hernández con base a estereotipos raciales y las opiniones de testigos expertos que han sido desacreditados", consideró AI en un comunicado.
La organización señaló que, después de que la junta de indultos y libertad condicional de Texas denegara el indulto, "la única esperanza para prevenir esta atrocidad es un indulto del gobernador Perry"
Hernández Llanas, de 45 años, fue condenado a pena de muerte en 2000 por el asesinato en Texas de su empleador y la violación de la esposa de la víctima, ocurridos tres años antes.
Según señaló AI, el mexicano sufre discapacidad mental con un "déficit adaptativo severo" en áreas como la lingüística, conceptual y social.
El gobierno de México y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han pedido también que se suspenda la ejecución.
Hernández es uno de los beneficiarios del "fallo Avena" de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que ordenó en 2004 a Estados Unidos revisar los casos de 51 mexicanos condenados a muerte, al considerar probado que se violó su derecho a asistencia consular. (DPA)