No obstante, cuatro días después del encuentro de las delegaciones de Sudán del Sur en la capital etíope Addis Abeba sigue sin haber negociaciones directas entre las partes. Las conversaciones se centrarían en un alto el fuego y una solución política a los combates que se registran en el joven país desde mediados de diciembre.
En tanto, observadores informaron que desde el fin de semana cada vez más soldados han desertado al bando del ex vicepresidente Riek Machar.
La lucha por el poder entre él y el presidente Salva Kiir hace tres semanas escaló en un sangriento conflicto de trasfondo étnico.
En la mañana de hoy, el presidente de la vecina Sudán, Omar al Bashir, llegó a la capital sursudanesa de Yuba para conversar con Kiir sobre la situación. Al Bashir teme que el conflicto afecte al flujo de petróleo desde el sur del país. La economía de ambos países depende de la venta de crudo.
Pese a todo, no dejan de llegar informaciones sobre fuertes combates sobre todo cerca de Bor, la capital del estado federado de Jonglei. Al parecer allí murió un destacado líder militar próximo a Kiir.
Las tropas del gobierno avanzaron hacia la ciudad, para liberarla de manos de los insurgentes. También cerca de Yei, en el estado de Ecuatoria Central, se libran combates desde este fin de semana. Unas 20,000 personas huyeron a la vecina Uganda, según fuentes de la Cruz Roja.