Desde vistosos filetes de tiburón hasta la famosa sopa de aletas, en el barrio chino de Bangkok los visitantes pueden deleitarse con un sinfín de delicatessen, cuya popularidad sobrevive pese a la drástica caída de turistas chinos y la advertencia de los ambientalistas de que muchas de estas especies están en peligro.
El tiburón, la delicatessen que sobrevive sin turistas chinos en Bangkok
