Según comunicó la compañía, el cierre de la planta localizada en la región metropolitana de Sao Paulo se realizará de forma gradual a partir de diciembre de este año con previsión de ser concluida la transferencia de producción 11 meses después, en noviembre de 2023.
La unidad, abierta en 1962, fue la primera de la compañía por fuera de Japón y actualmente emplea 500 personas en la producción de componente para la fábrica de motores de Porto Feliz, también en el estado de Sao Paulo y que produce los modelos Etios, Yaris y Corolla.
La planta, además, exporta piezas para Estados Unidos que sirven para la producción del modelo sedán Camry.
"Es importante decir que el movimiento prevé la manutención del empleo y será ofrecida la oportunidad -de traslado para permanecer con sus trabajos- al 100 % de los empleados que laboran en el ABC Paulista", como se conoce al cordón industrial de 3 municipios en Sao Paulo, resaltó la compañía.
Este año, Toyota había anunciado inversiones por 50 millones de reales (unos 10 millones de dólares) para la unidad de Indaiatuba, donde produce también el modelo Corolla sedán y que junto a las fábricas de Porto Feliz y Sorocaba recibirá la producción de Sao Bernardo do Campo.
"La iniciativa tiene por objetivo buscar más sinergia entre sus unidades productivas y forma parte de la búsqueda de más competitividad frente a los desafíos del mercado brasileño y de la sustentabilidad de negocios el país", completó.