La OPEP, que controla el 40 por ciento de la producción mundial de "oro negro", no abrirá más las espitas al considerar que la escalada de los precios se debe a la especulación y no a la escasez de crudo.
"La OPEP intervendrá para estabilizar el mercado cuando haya algún desequilibrio. Pero la OPEP no va a intervenir por los especuladores", afirmó su secretario general, Abdalá Salem El-Badri, en una entrevista que publica hoy el diario económico WirtschaftsBlatt.
El petróleo se ha situado por encima de los 90 dólares y el Brent, referencia en Europa, casi alcanza los 100 dólares, unos precios que no se habían visto desde octubre de 2008.
"Los especuladores han utilizado la oportunidad de disparar los precios. Tenemos que esperar. Los precios llevan solo dos o tres semanas así de altos", aseguró El-Badri.
"No queremos que la economía mundial se frene por un precio alto del petróleo. Siempre hemos reaccionado a una mayor demanda, como fue el caso de 2004 y 2005, cuando bombeamos más petróleo. Pero ahora el mercado está más que cubierto", explicó el secretario general de la OPEP.
En cualquier caso, El-Badri, aseguró que la OPEP intervendrá cuando se produzca una situación de desequilibrio en el mercado, y que organizaría una cumbre extraordinaria antes de la próxima reunión ministerial, prevista para junio en Viena.
En un momento de incertidumbre económica, el crudo, al igual que otras materias primas, se ha convertido en un valor refugio, lo que ha atraído mucho dinero que también ha contribuido a la escalada de las últimas semanas, según los analistas.
Algunos socios de la OPEP, como Venezuela, Irán y Libia, han afirmado que el precio "justo" del petróleo son 100 dólares por barril, por lo que no consideran que los actuales valores del crudo sean negativos para la economía mundial.