Tras un ajuste de las cifras, la Fed informó que en noviembre y en diciembre este indicador cayó el 0.6 % y el 1 %, respectivamente.
La bajada del 1 % fue la mayor caída en la actividad industrial desde septiembre de 2021 y, según señalaron los expertos, tuvo que ver con que las tasas de interés y los altos precios que pesaron sobre la demanda.
Este índice, que mide el porcentaje de recursos usados por las empresas y fábricas sobre la base de todas las plantas de producción disponibles en el país, se situó en enero en los 103 puntos, el 0.8 % más que en el mismo mes del año anterior.
Por su parte, la tasa de utilización de la capacidad industrial en EE.UU. se situó en el 78.3 % en enero, una décima menos que en diciembre, una tasa que está 1.3 puntos porcentuales por debajo de su promedio de las últimas décadas (1972-2021).
En enero, la producción manufacturera aumentó un 1 % y la producción minera creció un 2 %, tras dos meses con disminuciones sustanciales para ambos sectores.
La producción de servicios públicos cayó un 9.9 % en enero, "ya que el cambio de un clima inusualmente frío en diciembre a un clima inusualmente cálido en enero deprimió la demanda de calefacción", apunta la Fed.
El pasado 1 de febrero se produjo la última subida de tipos de interés por parte del regulador, que fue la octava desde marzo del año pasado, un alza de 0,25 puntos, que confirmó una ralentización en las subidas.
Con esta alza, menor que las subidas previas, los tipos se situaron en una horquilla del 4.5 % y el 4.75 %, la cifra más alta desde septiembre de 2007.
Todo ello con el objetivo de devolver la inflación al 2 %. Desde que alcanzó su pico en junio (9.1 %) de 2022, la inflación en Estados Unidos se ha relajado hasta el 6.4 % en enero, cuando bajó por séptimo mes consecutivo, aunque solo una décima.