La Agencia Francia Tesoro (AFT) precisó en un comunicado que la operación incluyó tres líneas de bonos con vencimiento de dos, tres y cinco años por un total de 8,450 millones de euros, cuando la demanda por esos títulos fue de 19,340 millones, es decir 2.3 veces más.
Esa tasa de cobertura se sitúa "en la media" de las emisiones realizadas por el Tesoro francés en 2011 y en las primeras semanas de 2012, destacó a Efe el portavoz de la AFT.
Además, se colocaron tres tipos de bonos indexados sobre la inflación (bien sobre el índice de precios al consumo armonizado de la zona euro o el de Francia) reembolsables respectivamente en julio de 2022, en julio de 2023 y en julio de 2027.
En el primer grupo, los bonos con vencimiento en julio de 2014 se adjudicaron por un valor de 2,090 millones de euros a un interés del 0.89 por ciento, lo que significa 16 puntos básicos menos que en una emisión equivalente celebrada en enero.
La segunda línea, con vencimiento en enero de 2015, fue de 1,335 millones de euros al 1.09 por ciento, una retribución notablemente inferior al 1.75 por ciento de otra similar subastada en mayo de 2010.
La tercera línea de bonos reembolsables en febrero de 2017 es nueva. Se atribuyeron 5,025 millones de euros, la mitad de los solicitados por los inversores, y a un interés del 1.93 por ciento.
La de hoy fue la primera colocación de deuda a medio y largo plazo después de que la agencia Moody's modificara, de estable a negativa, la perspectiva sobre Francia, sin retirarle la máxima calificación, la "triple A" por los riesgos que pesan sobre la zona euro.
Standard and Poor's el pasado 13 de enero sí que había bajado la nota de Francia, y fue la primera y única agencia por el momento que le ha quitado la "triple A".