El gobierno turco permitirá que el gasoducto South Stream, patrocinado por Rusia y rival del proyecto Nabucco que impulsa la UE y Turquía, pase por aguas bajo el control de Turquía.
Así lo informaron los primeros ministros de Rusia, Vladimir Putin, y Turquía, Recep Tayyip Erdogan, tras haber mantenido una reunión de varias horas en la que también participó su homólogo italiano, Silvio Berlusconi, ya que la compañía italiana ENI participa en el proyecto.
Según explicaron ambos mandatarios en rueda de prensa en Ankara, el gobierno turco concedió permiso a Rusia para que inicie estudios exploratorios en aguas del Mar Negro pertenecientes a la zona económica exclusiva bajo control de Turquía.
Además, los dos líderes firmaron 15 protocolos de cooperación en diversos sectores entre los que destacan los relativos a la energía atómica y al comercio de gas y petróleo.
A cambio del permiso para que el gasoducto South Stream pase por aguas turcas, Putin explicó que Rusia ha accedido a prolongar el acuerdo de exportación de gas a Turquía y a revisar los precios de esa importante fuente energética en beneficio turco.
Moscú aceptó asimismo prolongar el gasoducto Blue Stream hasta el sur de Turquía, de manera que Ankara pueda distribuir ese gas a Siria, Líbano, Israel y la parte turca de Chipre.
También Rusia entrará en el consorcio que desarrolla el oleoducto entre el puerto de Samsun, norte de Turquía, y la terminal petrolera de Ceyhan, en el sur, un proyecto en el que ya participa la italiana ENI.
"Las negociaciones no han sido fáciles, hemos tenido ciertas dificultadas, pero finalmente hemos llegado a un acuerdo en todos los temas", reconoció Vladimir Putin.
Tanto Putin como Erdogan subrayaron la importancia de que sus dos países hayan incrementado hasta este nivel su cooperación energética.
De hecho, Rusia es el primer socio comercial de Turquía y Turquía el quinto de Rusia.