Pese a que bajó 0.4 puntos porcentuales en relación a junio (6.0 por ciento) y volvió al nivel en que estaba en febrero, la tasa de paro del mes pasado se ubicó 0.2 puntos porcentuales por encima de la medida en julio de 2012 (5.4por ciento).
De acuerdo con los datos oficiales, el número de desempleados en julio en las seis mayores regiones metropolitanas de Brasil, en las que es medido el índice, era de 1.4 millones de personas, sin variación con respecto a junio ni al mismo mes del año pasado.
El número de personas ocupadas en las mismas seis ciudades en julio era de 23.1 millones, estable con respecto a junio pero en un 1,5por ciento superior al del mismo mes del año pasado.
Ello significa que Brasil generó en los últimos doce meses 339.000 nuevos puestos de trabajo.
El Instituto informó igualmente de que el rendimiento promedio del trabajador brasileño en julio era de 1,848.40 reales (unos 754.5 dólares), con una caída del 0.9 por ciento frente al de junio y un crecimiento del 1.5 por ciento en relación al mismo mes de 2012.
Brasil ha conseguido mantener los índices de desempleo reducidos pese a la crisis internacional y al bajo crecimiento de la economía nacional en los últimos años.
La coyuntura económica, sin embargo, ha reducido la capacidad del país de generar nuevo empleos formales.
Según cifras divulgadas ayer por el Ministerio de Trabajo, las empresas brasileñas generaron 41,463 nuevos empleos formales en julio, el menor número para ese mes en los últimos diez años y muy por debajo del alcanzado en el mismo mes de 2012 (146,496).
"Es nuestra realidad. No son los número que nos gustarían, pero el empleo por lo menos aún crece. Vivimos una crisis mundial y todo el mundo despide trabajadores", afirmó el ministro de Trabajo, Manoel Dias, al comentar los datos.
De acuerdo con el alto funcionario, con una economía que crecerá este año entre un 2 por ciento y un 3 por ciento, Brasil no puede generar tantos empleos como si se expandiera a tasas del 6 por ciento.
El Gobierno prevé para este año un crecimiento económico del 3,0 por ciento, por encima de la proyección del Banco Central (2.7 por ciento) y de los economistas del mercado financiero (2.21 por ciento).
El índice oficial de desempleo mide el número de personas que busca trabajo en las ciudades de Recife, Salvador, Belo Horizonte, Río de Janeiro, Sao Paulo y Porto Alegre, por lo que no tiene en cuenta a los ya absorbidos por el sector informal, a los que desistieron de buscar, ni al resto del país. (EFE)