La cita se realizará en homenaje a las memorias del prócer venezolano Simón Bolívar, en el 183 aniversario de su muerte, y del fallecido mandatario Hugo Chávez, así como del líder cubano Fidel Castro, inspiradores del proyecto de integración contrario al esquema de libre comercio.
Los gobernantes comenzaron a llegar hoy a Caracas. El presidente de Haití, Michel Martelly, fue el primero en arribar, junto con el primer ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit.
A la cita están confirmados los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega; de Ecuador, Rafael Correa; de Bolivia, Evo Morales; de República Dominicana, Danilo Medina; de Panamá, Ricardo Martinelli; de Surinam, Desi Bouterse; de Cuba, Raúl Castro y la mayoría de los jefes de gobierno de las islas caribeñas.
El ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Elías Jaua, instaló hoy el XII consejo político de la ALBA, dentro de las actividades previas a la reunión presidencial, donde destacó que las iniciativas de la ALBA y Petrocaribe "siguen estando vigentes más que nunca".
"El legado y la construcción del comandante Chávez junto a los líderes de la América Latina y caribeña que han empujados estos proyectos unionistas siguen más vigentes que nunca", señaló.
Agregó que tras la muerte de Chávez, ocurrida el 5 de marzo pasado, el ALBA sigue viva, a pesar de los temores de que desapareciera.
"Muchos quisieron hacer ver a nuestros pueblos que con la partida física de nuestro comandante Chávez comenzaba el derrumbe de esta integración y por el contrario, en este año hemos ido afianzando y profundizando estos mecanismos de unión", destacó.
En la cumbre de mañana, el ALBA y Petrocaribe planean firmar el tratado de Eco-ALBA y la creación de una zona económica común, que se propone como meta erradicar el hambre y la pobreza en la región.
"Al fin se va a producir la discusión y quizá estemos ya en condiciones de firmar el tratado constitutivo Eco-ALBA, que es el espacio económica de nuestra Alianza, y avanzar en la conformación de la zona económica con Petrocaribe", destacó Jaua.
La zona económica especial fue propuesta por el presidente venezolano Nicolás Maduro en la cumbre del ALBA realizada en Ecuador en julio pasado.
También se debatirá en Caracas sobre una eventual acercamiento entre la zona económica de ALBA-Petrocaribe y el Mercosur.
El ministro venezolano de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, dijo que Venezuela envía 100,000 barriles diarios de petróleo a los países firmantes del acuerdo de Petrocaribe.
"Eso genera una factura de 4,000 millones de dólares (al año) y ellos nos pagan 2,000 millones en efectivo y 2,000 con bienes y servicio, la mayoría en alimentos. Venezuela no está regalando petróleo", dijo en una rueda de prensa al rechazar críticas de la oposición al acuerdo energético.
Agregó que con estos mecanismos de integración Venezuela busca utilizar su influencia para abrir mercados para sus productos en el Caribe.
"Queremos que el esquema sea bidireccional para nosotros colocar nuestros productos allá. Esa es un poco la idea de la zona económica", indicó.
La creación del ALBA fue inspirada por Chávez y Castro en 2004 y después se sumaron Bolivia, Nicaragua, Dominica, Antigua y Barbuda, San Vicente y Las Granadinas, como una agrupación contra el neoliberalismo económico.
Por su lado, Petrocaribe es una alianza energética creada en 2005 que busca asegurar suministros petroleros a sus integrantes en condiciones de largo plazo y con bajos intereses. Lo conforman Venezuela, Cuba, República Dominicana, Antigua y Barbuda, las Bahamas, Belice, Dominica, Granada, Haití, Guyana, Jamaica, Surinam, Santa Lucía, Guatemala, San Cristóbal y Nieves y San Vicente y las Granadinas.