Estos dos proyectos suponen para Iberostate llegar a una inversión total realizada en los últimos años de cerca de 400 millones de euros.
En el complejo de Riviera Nayarit, bautizado como "Litibú", se han invertido 50 millones de euros, y va a ofrecer 33 residencias, 130 apartamentos y generará 300 empleos directos.
Su comercialización se ha iniciado a principios de año y finalizará en todas sus fases en el 2014.
Este complejo se unirá al otro que Iberostate tiene ya en marcha en México en pleno corazón de la Riviera Maya con una inversión de más de 100 millones de dólares, "Playa Paraíso".
Su construcción se iniciará el segundo trimestre de 2011 y se comenzarán a entregar las primeras propiedades a finales de 2012.