La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), responsable del citado informe, resalta que la reducción es significativa en Estados Unidos y Canadá, que conforman el mayor mercado de consumo de cocaína.
En Europa occidental y central la demanda de cocaína "parece haberse estabilizado después de muchos años de crecimiento".
Pero al mismo tiempo, la prevalencia del uso de esta sustancia, es decir, el indicador de la demanda de esta droga que se mide por el número de personas que la consume al menos una vez en el año, apunta a un aumento "en varias regiones con mucha población".
Así las cosas, a nivel mundial se perfila un desplazamiento de la demanda de esta droga, que se produce principalmente en los países andinos Colombia, Bolivia y Perú.
La ONU atribuye buena parte de la tendencia al alza de la demanda de cocaína en América Latina a una creciente facilidad de obtener esa droga de forma relativamente barata gracias a la proximidad de los países productores.
Pero en general, la tendencia observada en el planeta da pie a pensar que "a largo plazo, el crecimiento de la población mundial puede ser un elemento importante" para la demanda de cocaína.
Ante esta visión, "no hay certidumbre de que el uso de cocaína permanecerá concentrado en América, Europa y Oceanía", señala la ONUDD en el informe, y alerta del potencial de que aumente en "África y Asia, donde se sitúa la mayoría de la población del mundo".
Un máximo de 20 millones de personas han consumido esta sustancia al menos una vez el año pasado en todo el planeta, lo que supone un 0.45 por ciento de la población mundial de entre 15 y 64 años de edad.
Respecto a la producción global de esta droga, los datos apuntan a que tanto los de los cultivos de la planta de coca, como los indicadores relativos a la fabricación de la cocaína, permanecieron en 2011 relativamente estables respecto al año anterior.
La cantidad de cocaína fabricada, pura al cien por cien, se calcula entre 776 y 1.051 toneladas en 2011.
Las mayores incautaciones de cocaína se registraron en Colombia (200 toneladas) y Estados Unidos (94 toneladas).
En Bolivia se registró una reducción de las superficies de plantaciones de coca de un 12 por ciento, un logro que la ONU atribuye a los esfuerzos del gobierno de Evo Morales para erradicar cultivos ilícitos en parques nacionales y en áreas de Las Yungas de La Paz, el trópico de Cochabamba (Chaparé) y el municipio de Apolo.
Además, mediante la estrategia conocida como "renacionalización", las autoridades de ese país han logrado asimismo una reducción voluntaria, negociada con los cultivadores de coca, en aquellos lugares donde la ley nacional permite y regula la siembra de esta planta para usos tradicionales.
Frente a la reducción boliviana, Colombia y Perú "experimentaron pequeños aumentos" de las superficies con plantas de coca.
Lo que va en aumento es el rendimiento de los campos de cultivos ilícitos de coca: si entre 1990 y 2001 cada hectárea suponía una producción media de 4.2 kilogramos de cocaína, entre 2009 y 2011 esa cifra se situó entre los 5.1 y 6.8 kilogramos. (EFE)