El especialista del Instituto de Fisiología Celular de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alfredo Torres Larios, dijo que sería devastador que exista algún organismo resistente a todo lo que se conoce y que eventualmente provoque una pandemia.
Comentó que trabajan en la molécula denominada Ribonucleasa P o RNasa P, que es de gran importancia porque si se inhibe al ribosoma (complejo macromolecular de proteínas y ácido ribonucleico-ARN-, presente en todas las células) se interrumpe la vida de las bacterias.
Ello abriría paso a una nueva familia de antibióticos, porque hace casi 60 años no se ha innovado y las farmacéuticas dejaron de desarrolarlos debido a un interés limitado, porque no se suministran de forma crónica a un paciente, como ocurre con la insulina y otros medicamentos.
Aunado a ello, apuntó, los organismos desarrollan mecanismos de defensa contra los agentes que los atacan y las bacterias no son la excepción.
Indicó que por ello, durante varias décadas, las bacterias se han hecho resistentes a prácticamente todos los fármacos, y en Estados Unidos, donde se llevan registros, han aumentado las muertes de pacientes con infecciones, sobre todo de tipo hospitalario.
“Sería devastador que haya algún organismo resistente a todo lo que se conoce y que eventualmente provoque una pandemia, aunque ese es un escenario relativamente improbable por ahora”, aclaró el investigador.
Torres Larios encabeza la investigación de la estructura tridimensional de macromoléculas, una técnica que se utiliza en las farmacéuticas porque “implica que uno puede ver la molécula con la que trabaja y tener mejor capacidad de inhibir su función”, como ocurrió con el primer fármaco desarrollado a nivel molecular, el Tamiflu, contra la influenza.
Agregó que para continuar con la investigación realizada en la UNAM se requiere de alianza con algún laboratorio con el fin de llevar los estudios a otra escala.