El subdirector médico en el turno nocturno del Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) sugirió realizarse estudios como biometría hemática, análisis de orina, revisión del ácido úrico, de glucosa, presión y colesterol.
Además de hacerse una prueba de función tiroidea, si se tiene sobrepeso u obesidad y una radiografía de tórax si se trata de una persona que fuma.
“El paciente acude ya cuando está enfermo, se hace un poco el valiente y acude con nosotros cuando está complicado, mucha gente tiene años que no se hace estudios de laboratorio, que fuma y no se toma una radiografía, 30 por ciento de la población es diabética y lo desconoce”, indicó el también médico internista y neumólogo.
Destacó que en la población mayor de 60 años es común que se registren infartos cardiacos, embolias, hemorragias cerebrales, afectaciones respiratorias que incluyen neumonía, EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica).
Así como problemas articulares, sin omitir problemas de origen neurológico como el Alzheimer y el Parkinson, además de hipertensión, diabetes, insomnio y obesidad.
“Con la edad van saliendo las enfermedades e incluso se van juntando y después es como un abanico de enfermedades que van a tener. La recomendación es que los jóvenes se vayan cuidando desde ahora”, advirtió el especialista del IMSS en Jalisco.
A mayor edad, dijo, alto es el riesgo de descontrol de glucosa, presión arterial elevada, insuficiencia arteriovenosa, sobrepeso debido a falta de actividad física que suele derivar en problemas de rodilla y de columna.
“No nos cuidamos, somos sedentarios, no hacemos ejercicio y no nos hacemos los exámenes correspondientes”, refirió el doctor Santoyo Ayala.
El insomnio es otro factor que afecta la salud del adulto mayor, toda vez que es común que puedan dormir hasta un 30 por ciento menos de lo que dormía cuando tenía menos edad, debido a una alteración en su ciclo biológico, por lo tanto se recomienda que no hagan siestas durante el día, comentó.
Añadió que las personas de edad avanzada pueden desarrollar con mayor prevalencia la llamada apnea del sueño (cese momentáneo de la respiración mientras se está dormido), principalmente si son personas con sobrepeso u obesidad y que tienden a roncar de forma intensa.
Santoyo Ayala mencionó que los adultos mayores son más propensos a desarrollar neumonías, sobre todo si su sistema inmunológico no está fortalecido, por lo que es indispensable que anualmente se apliquen la vacuna antineumocócica.
Finalmente recomendó a las personas que padecen diabetes e hipertensión, incluir dentro de sus exámenes médicos de rutina, un electrocardiograma para descartar riesgos cardiacos.