UNICEF advirtió hoy que la falta de servicios de sanidad y cobijo son factores de alto riesgo de una propagación de la enfermedad, además de que continúa aumentando el número de personas que huyen de sus hogares y muchas otras que han acampado cerca de los escombros de sus casas.
Según datos previos al sismo, al menos uno de cada diez niños en Nepal no había sido vacunado contra el sarampión.
Esa enfermedad es altamente contagiosa y puede llegar a ser fatal, por lo que UNICEF alertó que puede propagarse rápidamente en las condiciones de hacinamiento en las que viven muchos de esos niños.
Por su parte, la directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos, Ertharin Cousin, acaba de concluir una visita oficial a las zonas más golpeadas por el terremoto para evaluar de primera mano la situación.
En un comunicado, Cousin indicó que la gran magnitud de la operación de asistencia requiere apoyo financiero suficiente y recordó el llamado de más de 116 millones de dólares para alimentar a casi un millón y medio de damnificados durante los próximos tres meses.