Ello, debido a que la forma de propagación es rápida y sencilla con acciones como compartir peines, cepillos, adornos para la cabeza, audífonos, sombreros, toallas o almohadas.
También sugirió revisar semanalmente la cabeza de los niños, poniendo especial atención en la nuca y detrás de las orejas, además si el menor de edad practica algún deporte no debe compartir cascos o gorras a fin de evitar la transmisión del insecto.
Refirió que la pediculosis es una afección cutánea producida por la infestación de piojos que se localizan en el cuero cabelludo, que se propaga principalmente entre los niños y puede provocar epidemias en escuelas.
El piojo es un insecto que vive en el cabello de las personas, se alimenta de pequeñas cantidades de sangre que extraen picando el cuero cabelludo, y su reproducción es muy rápida, pues a solo 24 horas de fecundada la hembra adulto comienza a depositar liendres.
Señaló que algunos de los síntomas son: comezón y ardor, irritación del cuero cabelludo, granitos en el sitio donde pica el piojo (cabeza y cuerpo), sensación de cosquilleo o movimiento en la cabeza y aparición de liendres.