Se estima que en México casi 11 millones de personas fuman, lo que representa el 15.9 por ciento de la población, además el gasto para atender las consecuencias del tabaquismo asciende a 60 mil millones de pesos al año, dijo el médico durante la inauguración del Primer Congreso de Intervención e Investigación en Tabaquismo.
El especialista recordó que este año el lema del Día Mundial sin Tabaco es “Alto al comercio ilícito de productos de tabaco”, el cual busca difundir el daño a la salud por los cigarros ilegales, así como su impacto en las políticas contra el tabaco.
Salas Hernández mencionó que para la institución que dirige el costo para atender la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) fue de 16 millones 308 mil 211 pesos, mientras que para el cáncer de pulmón fue de 47 millones 416 mil 334 pesos.
Además, dijo que de las 260 defunciones hospitalarias en 2014, el 4.6 por ciento fue a causa de EPOC y el 23 por ciento por los padecimientos asociados al tabaquismo como el cáncer.
En su oportunidad, la directora general de los Centros de Integración Juvenil (CIJ), María del Carmen Fernández Cásares, reportó que de 100 mil pacientes tratados al año en el INER, el 84 por ciento consume tabaco y el 90 por ciento alcohol, sin embargo, los pacientes no acuden por alguna de estas drogas legales, sino por el uso de cocaína, crack y marihuana.
La funcionaria destacó que el consumo de marihuana aumentó en México, pues el 86.5 por ciento de los pacientes consumen esta sustancia.
“Cada vez estamos viendo este cambio de patrón de tabaco por marihuana”, situación que Fernández Cásares relaciona con las campañas efectivas contra el tabaco, pero también por el éxito en la mercadotecnia “enmascarada” de la marihuana.
Por lo anterior, la especialista pidió impulsar la investigación de las enfermedades respiratorias relacionadas con la marihuana.
Fernández Cásares aseguró que las campañas contra el tabaquismo que aplican en las 116 clínicas de los CIJ, así como en el IMSS, en oficinas del SAT, Pemex y en varias empresas, son eficaces porque el 68 por ciento de los pacientes abandona el tabaco y el 30 por ciento disminuyen su consumo.