Las ventas avanzaron el 5 por ciento y se situaron en 3,593 millones de euros, según informó hoy la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNVM).
El grupo textil ralentiza así su crecimiento frente a trimestres anteriores en los que sus ganancias aumentaron a ritmos de entre el 20 por ciento y el 30 por ciento.
El resultado operativo bruto (ebitda) se situó en 749 millones, un 2 por ciento inferior al saldo de 764 millones obtenidos en el primer trimestre del ejercicio 2012.
El grupo cerró abril con 6,058 tiendas en 86 mercados tras efectuar 49 aperturas netas en 30 mercados diferentes, con Rusia, Japón y China a la cabeza. Estás cifras están en línea con el programa de crecimiento previsto para 2013, según Inditex.
En el primer trimestre, la empresa desarrolló "una gran actividad" en la ampliación de tiendas bandera, la introducción de la nueva imagen comercial, la apertura de establecimientos más grandes y la absorción de tiendas cercanas de menor tamaño.
El grupo opera online en 23 países (19 europeos, Estados Unidos, Japón, China y Canadá) y mantiene su previsión de abrir la tienda virtual de Zara en Rusia en otoño.
Los gastos operativos se mantuvieron "bajo estricto control" y crecieron el 7 por ciento, debido principalmente a la nueva superficie comercial abierta durante el período y el lanzamiento de nuevas tiendas.
Inditex señala que en los últimos doce meses ha generado más de 10,000 nuevos puestos de trabajo en todo el mundo y ha mantenido su apuesta por la inversión en España.
Además de Zara, el grupo Inditex es propietario de las marcas Bershka, Stradivarius, Pull & Bear, Massimo Dutti, Zara Home y Uterqüe.