A las 9:05 hora local (13:05 GMT), los contratos futuros de WTI para entrega en septiembre, mes de referencia, perdían 71 centavos con respecto a la sesión previa del martes.
El retroceso llegaba después de que el Instituto del Petróleo Estadounidense (API) anunciase que las reservas de crudo en el país crecieron la pasada semana en 7.5 millones de barriles, muy por encima de las expectativas de los expertos.
Esas cifras, que se completarán este miércoles con los datos del Gobierno, se suman a la preocupación por el avance de la COVID-19 en Estados Unidos, donde el número de casos sigue creciendo en una mayoría de estados.
En un claro cambio de mensaje, el presidente del país, Donald Trump, avisó este martes de que la pandemia "empeorará" antes de que haya una recuperación e insistió a la ciudadanía en el uso de las mascarillas.
Para la firma de análisis Rystad Energy, los comentarios de Trump ayudarán al mercado a medio plazo, por ser "quizás los anuncios más razonables sobre la pandemia por parte de la Administración estadounidense en mucho tiempo".
"Esto puede ser positivo para las perspectivas de demanda de crudo. En lugar de una segunda ola descontrolada de cierres, quizás ahora mejoran las posibilidades de que EE.UU. logre controlar los contagios", señaló en una nota el jefe de mercados petroleros de Rystad, Bjonar Tonhaugen.