A las 09:15 hora local (13:15 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en agosto sumaron 57 centavos respecto a la sesión previa del miércoles, cuando el Texas también avanzó un 1.4 %.
Los precios del petróleo subían y se situaban por encima de la barrera psicológica de los 40 dólares en la jornada posterior a la publicación de los datos de la Administración de Información Energética (EIA en inglés), que muestra la mayor caída en los inventarios de crudo en lo que va de año, con un descenso semanal de 7.2 millones de barriles, muy por encima de lo esperado por los analistas.
"Una gran caída en los inventarios, mucho más alta que la mayoría del mercado esperado, es claramente un factor de refuerzo. Típicamente esto indica un desarrollo positivo en la demanda o un movimiento negativo en la oferta. Pero como la oferta es bastante estable, el mercado asume que la demanda se mantiene fuerte, a pesar de las nuevas infecciones y las restricciones a raíz de la pandemia", explicó en una nota la analista de Rystad Energy Louise Dickson.
También han influido los datos positivos de empleo registrados en Estados Unidos durante junio, cuando la economía añadió unos 4,8 millones de puestos de trabajo, más del doble de lo esperado por los economistas encuestados por el Dow Jones.
Sin embargo, el repunte en los casos de COVID-19 en el país, especialmente tras producirse nuevas medidas de contención en estados como California, es una preocupación constante entre los operadores, que temen que otro golpe a la demanda vuelva a desequilibrar los mercados.