El petróleo de Texas baja 1.83% tras decepción por la duración de extensión de los recortes de OPEP

El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este lunes con una bajada del 1.83%, hasta los 38.83 dólares el barril, por la decepción respecto a la duración de la extensión de los recortes de producción de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+), que se extenderán hasta julio y no hasta septiembre, como apuntaban los cálculos más optimistas.

A las 09:15 hora local (13:15 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en julio restaban 0.72 dólares respecto a la sesión previa del viernes, cuando el Texas avanzó un 5.7 %.

El barril de referencia en EE.UU. bajaba tras haber sellado el viernes su mejor dato desde la caída de precios del 6 de marzo, cuando Rusia y Arabia Saudí fracasaron durante una reunión de la OPEP+ y se enfrascaron en una guerra de precios sin precedentes que coincidió con la pandemia de la COVID-19, que también provocó una caída histórica en la demanda.

Desde entonces, la OPEP+ ha intentado reconducir los mercados, sacudidos por la situación provocada por el virus y la disputa entre saudíes y rusos, con el recorte histórico de 9.7 millones de barriles por día (bpd) que entró en vigor el pasado mayo y que este fin de semana se ha extendido hasta por lo menos julio.

Asimismo, también preocupaba el efecto en la oferta que tendría la reapertura en el suroeste de Libia de dos grandes campos petroleros que llevaban parados varios meses después de un bloqueo que interrumpió la mayor parte de la producción del país.

"Los precios más fuertes se producen cuando la oferta se vuelve más ajustada. La reunión de la OPEP+ durante el fin de semana garantizó exactamente eso. Los recortes de producción voluntarios más profundos de la historia se extendieron hasta julio y el déficits en el suministro será casi seguros, lo que hará que disminuyan las existencias", explicó el analista jefe de mercados petroleros de Rystad Energy Bjornar Tonhaugen en una nota.

Asimismo, Tonhaugen apuntó que otro factor a tener en cuenta durante los próximos meses es cuándo se agotará la paciencia de Arabia Saudí y Rusia con los países que no han cumplido su parte en los recortes, como Irak o Nigeria.

Para el analista, esa paciencia "ya se está agotando" y "solo el tiempo dirá" si Riad y Moscú están dispuestos a seguir asumiendo la compensación de esos incumplimientos.