A las 09:15 hora local (13:15 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en julio restaban 0.35 dólares respecto a la sesión previa del martes, cuando el Texas avanzó un 3.87 %.
El barril de referencia en EE.UU. perdía valor a raíz de algunas informaciones en torno a la reunión por videoconferencia de la OPEP+ que se preveía adelantar a este jueves y que al parecer podría no celebrarse si los países miembros no logran resolver antes una disputa sobre el cumplimiento de los recortes de producción acordados en abril, según informa EFE Dow Jones.
La voluntad de Arabia Saudí, el principal país productor, es perseverar en ese recorte de 9.7 millones durante los próximos meses, lo que equivale a cerca del 10 % de la producción mundial de crudo.
En este sentido, Rusia se había mostrado proclive a facilitar la extensión, y según apuntan algunos medios especializados ya habían alcanzado un acuerdo para extender los recortes al menos un mes, pero en los últimos días las negociaciones entre ambas potencias se han tensado por el descontento con respecto a los niveles de cumplimiento de los recortes vigentes por parte de otras naciones productoras.
A pesar de estas tensiones, el mercado respiró aliviado ayer por el informe del Instituto Estadounidense del Petróleo (API en inglés), que calcula una caída en los inventarios de crudo de Estados Unidos de unos 483,000 barriles, aunque los analistas esperan conocer hoy los datos oficiales del gobierno federal.
Asimismo, ayudaba a los precios la recuperación china, cuyo sector servicios ha vuelto a crecer por primera vez desde enero, y el levantamiento de las medidas de contención del virus y las reaperturas económicas en buena parte del mundo.