La reunión fue encabezada, además de los titulares de las dependencias, por los presidentes de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), Oswaldo Guillermo Cházaro Montalvo,Benjamin Grayeb, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), y por el vocal ejecutivo de la Comisión Ejecutiva Bovinos Leche, Salvador Álvarez Morán.
También contó con la participación de Carlos Braña Rubio, presidente de la Asociación de Ganaderos Lecheros (ANGLAC), así como el vicepresidente Pecuario del CNA, Yamil García Kuri.
En la reunión Álvarez Morán, en su calidad de presidente del gremio lechero, resaltó en la reunión la importancia que tiene la cadena de la leche en el país, no sólo en el aspecto económico sino también en el social, ya que se cuenta con más de 250,000 unidades de producción que generan más 635 mil empleos directos e indirectos, enfatizando que el 96 por ciento de las unidades antes citadas cuentan con menos de 100 cabezas.
Señaló que actualmente la cadena de la leche, especialmente el sector ganadero está siendo golpeado con bajas en los precios pagados a los lecheros, así como rechazos de compra por una parte de la industria o compras por debajo de los costos de producción, lo que pone a los ganaderos en vías de la desaparición.
Refirió que el entorno global es el principal responsable de la situación, considerando que había una sobreoferta mundial de este alimento que ha provocado una caída acumulada en el precio del lácteo en polvo del 70 por ciento, desde diciembre de 2013 a la fecha, de tal manera que esa leche puesta en este país, se podría comercializar a la mitad de lo que cuesta producirla, lo que coloca a los productores en una franca desventaja con respecto a los países exportadores.
Además, refirió que, a diferencia de estos últimos, el sector lácteo mexicano no contaba con una política de estado que contemplara un marco legal e institucional que brinde certidumbre a los diferentes agentes económicos que participan en la cadena de valor, lo cual es necesario para planear la inversión, programar la producción, garantizando en el camino un ingreso justo para los ganaderos productores de leche, así como los apoyos necesarios para incrementar los niveles de eficiencia y productividad de manera sustentable y ordenada.
Álvarez comentó a los secretarios que en el seno de la Comisión Ejecutiva Bovinos Leche (CEBL) se han hecho propuestas que podrían, de llevarse a cabo, contribuir a resolver algo de la problemática de la leche, sin embargo, manifestó la preocupación de que la situación empeorase de incluir a la leche en el Acuerdo de Asociación Transpacífico, ya que en la región se encontraba el principal exportador de leche y quesos en el mundo, que es Nueva Zelanda.
Agregó que en la CEBL los productores y la industria habían llegado al consenso de proponer una posición conjunta, tomando en cuenta la sensibilidad de la industria mexicana a la importación de ciertos productos lácteos.
Solicitó a los negociadores mexicanos ante el TPP no presentar ofertas adicionales no acordadas o consensuadas por el sector, ya que ello pondría en riesgo los equilibrios logrados al interior de la cadena.
Esta semana se tiene planeado la continuación de las negociaciones en Atlanta, Georgia, Estados Unidos, en la que se darán cita los integrantes de la Comisión Ejecutiva Bovinos Leche para estar cerca de los negociadores mexicanos.