La empresa quiere traspasar en los próximos cinco años un 20 por ciento de la capacidad de su red de telefonía móvil a Drillisch. Asimismo, su rival tendría la posibilidad de adquirir un 10 por ciento más adicional. De momento, ninguna de las dos empresas ha querido hablar del precio de esta operación.
De esta manera, la filial alemana de Telefónica, Telefónica Deutschland, que opera con la marca O2 en el país, quiere salvar el último escollo para conseguir la aprobación de la instancia europea antimonopolios.
Telefónica Deutschland quiere hacerse con la subsidiaria de la holandesa KPN por más de 8,000 millones de euros (10,800 millones de dólares).
La fusión del tercer y cuarto operador móvil en Alemania creará el mayor del país, por encima de los dos líderes actuales, Deutsche Telekom y Vodafone. (DPA)