Trabajadores de la compañía pública Luz y Fuerza del Centro (LyFC), que abastece al centro del país, se concentraron en la sede del sindicato, mientras sus líderes analizan medidas en respuesta a la intervención de la empresa por parte del gobierno.
En un comunicado el SME informó de que las instalaciones de LyFC fueron ocupadas por policías federales poco antes de las 23:00 horas locales del sábado, sin que el sindicato "tenga conocimiento de que se haya exhibido alguna orden de presentación o aprehensión" contra alguno de sus líderes.
"Dicho suceso afortunadamente está transcurriendo sin incidentes hasta ahora por parte de los trabajadores de guardia de cada una de las instalaciones, incluyendo elementos de seguridad que resguardaban los inmuebles afectados", indica el boletín.
Tras la acción de los policías federales, el Gobierno publicó un decreto en el Diario Oficial de la Federación en el que anunció la liquidación de la empresa por sus malos resultados operativos y financieros.
El SME, enfrentado con las autoridades porque no reconocen a su líder, Martín Esparza, alertó en el comunicado de las "graves implicaciones" que la medida puede acarrear a miles de trabajadores y a los millones de usuarios del servicio.
El decreto asegura que el suministro está garantizado y que los trabajadores serán indemnizados de acuerdo a las leyes laborales.
Debido a la "incertidumbre" y a la "poca información" de que dispone, agregó el sindicato, la agrupación de trabajadores tardará unas horas en "fijar una postura" sobre los hechos, que calificó de "cuestionables y desconcertantes".
LyFC abastece de electricidad a la capital mexicana y a algunos municipios de los estados centrales de Morelos, Estado de México, Puebla e Hidalgo, y tiene 6.2 millones de clientes.