Al inaugurar el seminario "Medicamentos Biotecnológicos: Agenda Pendiente para México", el ministro señaló que en fechas recientes la regulación jurídica en este tipo de medicamentos ha sufrido algunas transformaciones, concretamente a través de modificaciones a la Ley General de Salud y del Reglamento de Insumos para la Salud.
Dijo que es importante ponderar los beneficios o perjuicios que puede tener en la población el uso de estos importantes avances tecnológicos, "pero seguramente las autoridades legislativas y administrativas buscarán manteneraabierta la posibilidad de que los mexicanos se beneficien de biofármacos y biomedicamentos seguros y confiables, sujetos a estrictos controles de calidad".
Ortiz Mayagoitia indicó que la tecnología transforma y define la forma en que convivimos; las relaciones sociales, la política, la estrategia militar, la economía y las leyes, señaló, son claramente influídas por el desarrollo científico y tecnológico.
Sobre el seminario inaugurado, indicó que este tipo de eventos fortalecen la regulación implementada por las autoridades legislativas y administrativas, creando un ambiente abierto y plural de discusión, además enriquece la interpretación de los juzgadores, dotándolos de conocimiento especializado en la materia.
Por su parte Jorge Amigo Castañeda, director general del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), comentó que actualmente los medicamentos biotecnológicos representan el 12 por ciento en el mercado, pero se prevé que para el año 2020 tengan una proyección del 50 por ciento, lo cual solucionará las demandas de los problemas de salud en el mundo.
Indicó que del año 2000 al 2010 se han otorgado 400 patentes de medicinas de este tipo por lo que México debe ser actor importante en el desarrollo de los mismos.
A su vez, Miguel Ángel Toscano Velazco, de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, expresó que es necesario anteponer la salud de los mexicanos, propiciando la innovación de nuevos productos sobre la base de la competencia económica, por lo que este organismo se encargará de velar por la salud de la ciudadanía y si resulta necesario modificando la regulación de dichos fármacos.
Señaló que la meta es contribuír al establecimiento de un sistema de salud altamente eficiente, garantizando la calidad, seguridad y eficacia de los insumos para la salud que se consumen en México.