Por falta de información del personal del Metro, los usuarios preguntaban entre los andenes del paradero y dentro de las instalaciones de las cuatro líneas que convergen en Pantitlán la ruta más rápida para llegar a Oceanía para continuar su camino.
Los policías de las estaciones no conocían bien a bien las medidas que había tomado el STC, algunos mandaban a la gente al paradero de autobuses Pantitlán que los transportaría a Oceanía; sin embargo, los usuarios al llegar al lugar se daban cuenta de que tales camiones no estaban.
José Acosta, trabajador de una tienda departamental por el rumbo de Lindavista, tuvo que levantarse casi una hora antes de lo acostumbrado para no llegar de nuevo tarde, como el lunes, a su empleo; "ayer me agarró de sorpresa, cuando vi el Metro cerrado, no había autobuses y la línea rosa estaba bien llena".
Este martes la Línea 1, que corre de Pantitlán a Observatorio, sugerida por el director del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Francisco Bojórquez, como vía alterna a los usuarios afectados por el cierre de las estaciones inundadas, tuvo una afluencia mayor a lo acostumbrado.
Centenares de usuarios la utilizaron como conexión a los autobuses dispuestos por la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), que brindan un servicio gratuito de la estación Boulevard Puerto Aéreo a Oceanía mientras se realizan los trabajos de reparación.
A pesar de que las 30 unidades de la RTP funcionan de manera continua, por la mañana se vieron rebasados por la cantidad de usuarios, lo cual provocó largas filas afuera de las estaciones Boulevard Puerto Aéreo y Oceanía.
En la hora pico, el tiempo promedio para subir a un autobús de la RTP era de 20 minutos, por lo que algunas personas buscaron medios alternos para movilizarse, como taxis, trolebús y los microbuses que corren en ese tramo de Circuito Interior.
