El jefe delegacional en Benito Juárez declaró que “habrá que bajarle a la intervención de políticos y subirle a los intereses de los vecinos” para acabar con las construcciones irregulares en la demarcación, dando origen a un procedimiento jurídico que desemboque en la clausura definitiva y demolición de 209 inmuebles irregulares, ya sea por que presentan proyectos de construcción incongruentes con los procesos constructivos, hagan uso de documentos apócrifos o construyan sin dar parte a la Ventanilla Única de la Delegación Benito Juárez.
El Programa de Reordenamiento arrancó esta mañana con la colocación de sellos de suspensión entre tres construcciones irregulares: El conjunto residencial localizado en Damas 72, colonia San José Insurgentes donde se violó con flagrancia el uso de suelo, toda vez que se pretende construir cuatro pisos más de los manifestado y 46 viviendas más de los inicialmente señalado.
La Segunda construcción declara en suspensión de actividades, corresponde al número 93 de la calle Bruno Traven, en la colonia General Anaya, construcción en la que también se construyen pisos y viviendas de más, bajo el supuesto amparo de la Norma 26 que norma la vivienda popular, pero que en su publicidad desmiente y contraponen, al anunciar un costo por departamento de más de dos millones de pesos.
Finalmente el predio marcado con el número 4 de la calle Charco Azul, en Mixcoac se colocó sellos de suspensión por no corresponder la manifestación de obra, con la construcción de un templo. Un inmueble que está catalogado por Antropología e Historia y el Instituto Nacional de Bellas Artes como un edifico con valor histórico y artístico.
Jorge Romero declaró que el procedimiento a seguir consta de colocar en primer instancia los sellos de suspensión, iniciar el procedimiento de clausura y finalmente concluir con la demolición de obras irregulares.
En esta primera etapa, la Delegación Benito Juárez anuncia 209 clausuras y demoliciones de obras irregulares, de un universo cuantificado preliminarmente en 900 construcciones.
Como acciones complementarias Jorge Romero giró instrucciones al área de Comunicación Social para que diseñe y elabore un tríptico que informe puntualmente a los vecinos de las acciones iniciadas; con la colaboración de vecinos, urbanistas y técnicos especializados formular un nuevo Plan de Desarrollo Urbano para la delegación, que realmente corresponda a las posibilidades de cada colonia y finalmente, pidió a la Dirección General de Jurídico y Gobierno, generar y resolver conforme a derecho, facultades y argumente evidentes, la revocación de toda manifestación de obra irregular.
“Un gobierno de soluciones -aseveró Jorge Romero Herrera-, es el que se compromete con los vecinos a impedir todas las construcciones irregulares. Indicó que, hoy la autoridad de Benito Juárez toma y hondea la bandera de los vecinos que se quejan de tanta construcción irregular”, concluyó.