Bajo un sol magnífico y un ambiente maravilloso, el artista norteamericano hizo cuatro instalaciones distintas con la gente participante: dos con todos los participantes en dos lugares diferentes; una solamente con mujeres y otra más sólo con varones.
Esta inmensa escultura viviente muestra la vulnerabilidad de los seres humanos y su cultura frente a los devastadores efectos del cambio climático. Los vinos, la gastronomía francesa, el hombre y planeta en general se verán seriamente afectados si la comunidad internacional no actúa hoy.
A dos meses de la cumbre del clima que se llevará a cabo en Copenhague, en diciembre de este año, Greenpeace hace un llamado de urgencia para encontrar las soluciones y reducir drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero, además del apoyo financiero para efectos de mitigación y adaptación para los países en desarrollo.
Los políticos deberán actuar porque "la naturaleza está a punto de tomar las armas de frente a la violenta dominación del hombre", dijo Spencer Tunick durante la instalación.
Para actuar y exigirle a la delegación mexicana que también se comprometa en Copenhague, firma nuestra petición en www.pintalelaraya.org ¡Necesitamos ser más para salvar el clima!