Después de un 2009 difícil para el sector de la automoción, el Salón de Ginebra "ha demostrado su capacidad de adaptación", señalaron los organizadores en un comunicado.
Al iniciarse este evento anual se había previsto que unas 700 mil personas recorrerían los siete pabellones del salón.
Más de un centenar de novedades mundiales y europeas fueron presentadas en los once días que duró el salón, considerado el más internacional de los que tienen lugar en el mundo con un 40 por ciento de público extranjero.
El Salón de Ginebra marcó un año más la pauta de la industria automovilística al mostrar una firme tendencia "verde", acompañada como en ninguna otra edición de la tecnología de infraestructura de recarga, con algunas empresas de energía que mostraron los postes a los que deberán enchufarse los híbridos enchufables y los eléctricos.
De las novedades exhibidas en el salón suizo, unas sesenta guardan vínculo con la electrificación del vehículo, una tendencia que ha alcanzado incluso a los fabricantes de coches más lujosos.
Los organizadores anunciaron que la próxima edición tendrá lugar del 3 al 13 de marzo de 2011.
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