¿Acatará Rusia su derrota en el caso Yukos, por el que deberá pagar 50,000 millones de dólares (37,200 millones de euros)?
Rusia quiere apelar el fallo, ya que sostiene haber actuado como correspondía contra Yukos, acusada en su momento de cometer evasión fiscal. Pero si finalmente los demandantes cobraran lo exigido, la derrota política para Vladimir Putin sería atronadora. El monto a pagar, una suma equivalente al costo que tuvieron los Juegos Olímpicos de Sochi, debería salir de las arcas públicas. Es decir, para Putin, el golpe no sólo sería político, sino que la cuenta también sería una fuerte carga para la economía nacional. Además, la Justicia rusa también había acusado a los directivos de Yukos de asesinato.
¿Pagará Rusia?
Por lo general el gobierno ruso suele pagar las multas que le impone por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo a raíz de sus políticas. No obstante, en el caso de la sentencia emitida por La Haya, Rusia se ve ante el problema de no contar con suficiente representación jurídica. Si Rusia no reconoce el proceso como tal, no pagará. Por el momento, el tribunal internacional exige que el pago se haga efectivo antes del 15 de enero de 2015. A partir de esa fecha comienzan a correr los intereses.
Mijail Jodorkovski, antiguamente al frente de Yukos y un fuerte opositor del Kremlin, ¿obtendrá beneficios económicos a través de esta sentencia?
No. Cuando Jodorkovski escribió desde prisión una carta dirigida a Putin pidiendo un indulto, señaló que no exigiría ninguna indemnización. El Kremlin interpretó la solicitud además como un gesto en el que el condenado admitía los crímenes por los que fue sentenciado, pese a que Jodorkovski siempre aseguró ser inocente. El empresario tomó igualmente distancia de los procesos judiciales relacionados con la empresa. La demanda fue presentada por el Group Menatep Limited (GML), que en el pasado fue el principal accionista de la petrolera. Jodorkovski ya había vendido su participación a GML en 2005. Sin embargo, el ex directivo saludó la sentencia.
¿Qué significa para Rusia la sentencia en el caso Yukos en el actual contexto político?
Refuerza, por un lado, la convicción en Rusia de que gran parte de Occidente está decidido a confrontarla y a forzar un cambio de rumbo de las políticas de Putin. Rusia siente que está en el punto de mira internacional por el respaldo brindado a los separatistas del este de Ucrania. Estados Unidos y la Unión Europea aprueban cada vez más sanciones en su contra, y a eso se suman los miles de millones exigidos desde La Haya. La condena, asegura el congresista Vladimir Pliguin, es de motivación política, es como una sanción más en contra del país. "Es una sentencia dirigida en contra de Rusia y no puede ser aceptada", clamó el integrante de la Duma.
¿Cómo reacciona Rusia a esta sanción? ¿Provocará un cambio de postura?
La economía rusa atraviesa un periodo de recesión. Las sanciones generan aún mayores daños y generan un clima de poca propensión hacia las inversiones en el país. Por el momento Moscú ha optado por no tomar medidas para compensar esta situación, pero los analistas advierten que, de seguir agudizándose, podría producirse una reacción. No parece que Rusia vaya a cambiar su rumbo político ni a dejar a los separatistas prorrusos de Ucrania abandonados a su propia suerte. Moscú insiste más bien en que se declare un alto del fuego y que se lleven adelante conversaciones de paz para poner fin a la crisis ucraniana.
¿Cuál es la situación en el este de Ucrania?
No existen informes independientes desde la región en conflicto, pero las informaciones indican que las tropas ucranianas se proponen abrir un corredor que atraviese la región en conflicto. Por eso se reportaron combates en las ciudades de Gorlovka, Shakhtyorsk y Tores, lo que implica que Donetsk, una ciudad de millones de personas y centro de la autoproclamada República Popular, estaría en gran parte rodeada. En este avance, Ucrania no respeta los 40 kilómetros de cese del fuego que se habría aprobado para permitir el acceso de equipos de investigación al sitio en el que se estrelló el vuelo MH17 hace dos semanas. (DPA)