De esta manera, Merkel y su socio en el gobierno de coalición alemán se aliaron también a nivel europeo para que la mandataria alemana pueda ver al candidato conservador en el puesto más importante de la Unión Europea (UE). Sin embargo, este acuerdo no asegura cien por cien el nombramiento de Juncker, aunque allana significativamente el camino.
En plena lucha de poderes en el seno de la UE tras las elecciones al Parlamento Europeo, la sorpresa llegó a primera hora del día de hoy cuando el SPD anunció su decisión de renunciar a que su candidato, el alemán Martin Schulz, sea presidente de la Comisión Europea.
"El SPD aceptará un comisario de la Unión (partido de Merkel), siempre y cuando Martin Schulz sea elegido presidente del Parlamento Europeo", explicó el presidente del partido y vicecanciller alemán, Sigmar Gabriel, en declaraciones que recoge la edición digital de la publicación alemana "Der Spiegel".
"A la vista de los desafíos en Europa necesitamos un fuerte eje Juncker/Schulz", aseguró el también ministro de Economía alemán.
Los socialdemócratas se comprometerían a elegir al candidato conservador, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, como presidente de la Comisión, después de que Schulz sea de nuevo presidente del Parlamento. "La elección de Juncker como presidente de la Comisión y la elección de Schulz deberán ir de la mano", aseguró Gabriel.
Merkel no dudó en aceptar la propuesta socialdemócrata. "El grupo alemán del Partido Popular Europeo en el Parlamento Europeo apoyará a Schulz para ese cargo", afirmó Merkel tras un encuentro con el primer ministro de Estonia, Taavi Rõivas, en Berlín.
Asimismo, la mandataria alemana reconoció ser consciente de que no podrá hacer cambiar de parecer al primer ministro británico, David Cameron, contrario a que el luxemburgués ocupe la presidencia de la Comisión.
"Creo que los británicos han dejado claro su opinión y no creo que vayan a cambiar su punto de vista", señaló Merkel. En este punto la canciller alemana recordó que no es necesaria una decisión "por unanimidad" entre los jefes de Estado y de gobierno.
El cambio de posición del SPD sorprendió en medio de una lucha de poder en Bruselas por la presidencia de la Comisión. Gabriel ha propuesto informar de la nueva postura del partido este sábado en el encuentro informal organizado por el presidente francés, François Hollande, para preparar la cumbre de la semana próxima.
Anteriormente, la Unión Cristianodemócrata (CDU) y Social (CSU) habían descartado que Schulz pudiera ser nuevo vicepresidente de la Comisión. Con este acuerdo el SPD quiere evitar que en este tira y afloja al final Schulz se quede sin ningún puesto en el seno de la UE.
A pesar de la mayoría justa de cristianodemócratas y socialistas en el Parlamento, su elección se ve como probable. De esta manera, el que fuera presidente del Parlamento Europeo hasta este mes podría ser reelegido para un segundo mandato al frente de la cámara legislativa europea.
En el seno interno del SPD hacía tiempo que habían asumido que no tenían posibilidad alguna de reclamar la presidencia de la Comisión en base a la ventaja lograda por los conservadores en las elecciones europeas de finales de mayo.
En el encuentro en París, organizado a petición de Gabriel y del canciller austriaco, Werner Faymann, se establecerá la estrategia de los socialdemócratas europeos para las próximas negociaciones en Bruselas y Berlín.
Junto a Gabriel, Faymann y el presidente francés, François Hollande, estarán presentes también el primer ministro italiano, Matteo Renzi, el belga Elio Di Rupo, así como Schulz. (DPA)