"Los terroristas esperaban dividirnos y no han hecho más que unirnos. Han sembrado el miedo y han recogido la determinación. Lo único que nos han dado es hambre de vivir", dijo Macron en un discurso ante los reyes de España, Felipe y Letizia, en la primera jornada nacional que Francia dedica a las víctimas del terrorismo.
En un solemne acto en la explanada parisina de Trocadéro -a pocos metros de donde se firmó la Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1948-, el presidente francés prometió que frente a los terroristas luchará con "unidad, recuerdo y acción".
La unidad europea, juzgó, quedó testimoniada por la presencia del rey Felipe VI en la celebración de esta jornada, que coincide con el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.
"Cualquiera que sea su país de origen, las familias de todos los muertos en suelo francés son acompañadas", subrayó Macron, antes de comprometerse a promover el recuerdo de los nombres y las caras de aquellos que perdieron la vida.
El jefe del Estado francés aseguró que el memorial a las víctimas del terrorismo que anunció en 2018 "será llevado a cabo".
Y también dijo que su país "actuará con toda la determinación" contra los responsables de esos actos criminales, porque "la República se lo debe a las familias de quienes cayeron.
Tras saludar el compromiso de sus predecesores François Hollande y Nicolas Sarkozy -también presentes en la conmemoración-, repasó logros de la cooperación europea en la materia, antes de añadir que "esa cooperación permitió a España y Francia acabar con ETA hace unos años".
"No renunciaremos a nada (...) Ni a las terrazas, ni a las salas de concierto. Ni a la libertad de creer o no creer, de pensar, de dibujar, de blasfemar. No renunciaremos a la igualdad entre hombres y mujeres, a la de todos los ciudadanos, a la fraternidad; pues nuestros hijos, amigos y conciudadanos han caído por eso", recordó.
Macron aludió de esa forma a algunos de los atentados más brutales que han sacudido Francia en los últimos años, como los de noviembre de 2015 contra la sala Bataclán y las terrazas, o contra la revista satírica Charlie Hebdo, en enero de ese mismo año.